miércoles, 5 de diciembre de 2007

Cero Violencia


Violencia verbal.
Ilustración de Pedro X. Molina

He decidido iniciar una nueva campaña opositora. Pero ésta, muy democráticamente, se opone al gobierno y también a los opositores. La campaña, desbordando en creatividad, se llamará:

CERO VIOLENCIA

Sí, señores y señoras. Porque quiero empezara vivir en un país donde se rescate la mesura en el lenguaje público; donde no estemos oyendo a cada rato al gobierno y a la oposición llamándose de tripas verdes y barrigas azules para abajo, dictaminando agoreros hasta del mal del que se van a morir y usando un lenguaje tan procaz, tan grosero, que si Bello, Rodríguez y Bolívar estuvieran aquí, serían ellos los que dirían al únisono el famoso "¿por qué no te callas?".

NO, señores. NO nos la calamos más. Es hora de tomar en serio al país y a sus ciudadanos. De dejarse de chismecitos de pasillo acerca de las malcriadeces del Emir de Anarquistán, de acabar de una vez por todas con el cotilleo sin provecho; porque nada vamos a sacar con saber que tuvieron que darle un baño de agua fría al muchachito para que se calmara, que tuvieron que ofrecerle una piñata más grande, un juguete más bonito para que dijera que SÍ, que SÍ le daba la razón al otro, de vainita, pero se la daba.

¿Hasta cuando vamos a vivir pendiente de quién es el más jaleti del Emir? ¿De cuántos rasguños tiene en los nudillos después de poner en aprietos a los creativos para saber cuál sería el nuevo nombre del salón de los espejos cuando no dejara ninguno entero? ¿De cómo la Guardia Real tuvo que "alcagüetear" la pataleta, porque la cosa estaba tan mala que de dos males ese era el menor?

¿Hasta cuándo vamos a escuchar a los opositores burlándose en el cotilleo rosa del arranque de malcriadez en privado del Emir? ¿Hasta cuándo vamos a escuchar al Emir y a sus cortesanos vilipendiar, agredir, difamar a quienes no piensan como ellos o tienen la valentía de manifestar su desacuerdo? ¿Hasta cuándo los adversarios van a seguirle el jueguito de la mala educción? ¿Hasta cuándo vamos a quedar como unos pusilánimes que pasan pena ajena y son dirigidos por un lote de energúmenos cada vez que al muchachito le da por opinar del ámbito internacional?

Ya está bueno, ¡caramba!

En vez de una nueva Carta Magna, lo que todos necesitan es el Manual de Urbanidad de Carreño, y no precisamente del Carreño que mediáticamente aparece por todos lados en Anarquistán con su sonrisita de "aquí no pasa nada" mientras la nariz le va ganado la carrera a la de Pinocho.

Es hora de la reflexión y la mesura. De dejar la soberbia de lado. De enteder lo que nos dice el país. Gago, tartamudo, afónico, agónico y enrollado; nos está diciendo que quiere PAZ.

Dile CERO a la VIOLENCIA

CERO matazón de gente los fines de semana.
CERO impunidad.
CERO estímulo a la agresividad y la delincuencia.
CERO omnipotencia para el Emir.
CERO omnipotencia para la corte.
CERO motorizados amenazantes.
CERO gasto militar y armamentista.
CERO corrupción.
CERO regalar lo que se necesita aquí.
CERO hospitales en mengüa.
CERO escuelas que se caen.
CERO irrespeto por el mérito profesional.
CERO irrespeto por la divergencia.
CERO dependencia de las instituciones públicas a los designios del Emir .
CERO lenguaje inapropiado.
CERO explotación de niños para fines políticos.
CERO listas inquisidoras.
CERO encapuchados.
CERO provocadores.
CERO intolerancia.

NO más patria o muerte. CERO. Que mejor sea Patria y Vida, así, con mayúsculas.

Madurez política señores, es - entre otras cosas - moderar el lenguaje: también dile NO a la violencia verbal.

Únete a la campaña: CERO VIOLENCIA

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Apoyo la idea.
Me gustó Anarquistán.
:)

Anónimo dijo...

¿Cuántos pensaremos así? ¿seremos los suficientes como para crear una silent majority?